Hay 7,43 millones de árboles nuevos en Argentina. Se plantaron con la primera transferencia de fondos del Seguro Verde, que fue de 96 millones de pesos. El plan había sido anunciado por el Gobierno en junio del 2018 y busca compensar los gases que emiten los vehículos que manejamos.
Es una iniciativa conjunta entre la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) y compañías aseguradoras de automotores. Destina el 1% del valor de cada póliza de autos, motos y camiones de carga a la Ley de Promoción Forestal N° 25.080.
En la primera etapa se plantaron 7.432.200 árboles, principalmente de las especies coníferas, eucaliptos y salicáceas. En total, abarcan una superficie de 9.200 hectáreas. Eso equivale a casi la mitad de la ciudad de Buenos Aires o unas 16 mil canchas de fútbol.
Se beneficiaron 14 provincias, en especial las mesopotámicas, con Corrientes a la cabeza (2,4 millones de árboles), seguida por Misiones (2,2 millones) y Entre Ríos (1,1 millones).
La provincia de Buenos Aires ganó casi 710 mil árboles. Pero no hubo ninguno para la Ciudad, porque esto financia las plantaciones comerciales, no las urbanas.
También quedaron más verdes las provincias de Chubut (417.392 árboles), Neuquén (268.000), Tucumán (83.728), Mendoza (19.184), Santiago del Estero (18.400), Salta (18.400), Chaco (5.600 árboles), Jujuy (4.000), Río Negro (1.280) y San Juan (1.224).
¿Por qué se plantan árboles?
Según lo difundido por la Asociación Forestal Argentina (AFoA), los árboles son uno de los mecanismos más eficientes para la captación de CO2, gas que provoca el cambio climático. Además, la madera es uno de los materiales más amigables para las industrias carbono neutro.
Actualmente, nuestro país tiene 1,3 millones de hectáreas de bosques cultivados. El objetivo del Seguro Verde es pasar a los 2 millones de hectáreas en 2030, y así cumplir con el compromiso que asumió Argentina frente a la ONU-FAO.
«Hoy se están plantando 40 o 50 mil hectáreas. Necesitás duplicar lo que se está plantando hoy para poder llegar a los objetivos», dice a Clarín Claudia Peirano, directora ejecutiva de AFoA.
Según esta asociación, la producción forestal permitirá al país duplicar la oferta de madera, considerando que tenemos uno de los consumos más bajos del mundo. Esto expandiría su empleo en construcción, muebles, aberturas y papeles. Dicen que traerá beneficios ambientales -porque reemplaza el plástico, el cemento y otros materiales no renovables- y favorecerá el desarrollo económico, al atraer inversiones en la construcción, la generación de energías renovables y el papel. Por eso, estiman que se pueden crear alrededor de 110.000 empleos directos.
Qué hacen las aseguradoras
Desde la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN) explicaron a Clarín que, durante su proceso de modernización, digitalizaron las pólizas de seguro. Calcularon que las compañías iban a tener alrededor del 1% de ahorro entre la impresión de la póliza, el armado, el envío y el archivo. Ya no iban a gastar en todo eso. Entonces, les propusieron que ese ahorro fuera destinado al Seguro Verde.
Decidieron participar en forma voluntaria 11 compañías que representan más del 50% de la producción de primas de automotores. Las empresas son Cooperación Seguros, Federación Patronal, Instituto del Seguro de Entre Ríos, La Segunda, Nación Seguros, Paraná Seguros, San Cristóbal, Sancor, Seguros Metal, Triunfo, y Zurich. Además, se sumó la Federación Argentina de Productores Asesores de Seguros (FAPASA), que nuclean a los vendedores intermediarios.
Las aseguradoras destinan el 1% del valor de cada póliza de automotores, motos y camiones. Esos fondos van a una cuenta en la Superintendencia de Seguros. La Superintendencia se queda con el 10% para hacer un programa de comunicación y de sensibilización respecto a la importancia del Seguro Verde. El 90% restante lo manda a la Secretaría de Agroindustria para el pago de los aportes de la Ley de Promoción Forestal N° 25.080, de promoción a las inversiones de bosques cultivados. La Secretaría de Agroindustria es el organismo de aplicación de esta ley: el dinero se les entrega a los productores forestales, una vez que las plantaciones que hicieron están certificadas.
Los aportes se realizan en forma trimestral y se mantendrán por el tiempo que las compañías quieran participar en el proyecto. Ya hubo una segunda entrega, por más de 180 millones de pesos, aunque todavía no se tradujo en árboles plantados porque está en proceso.
¿Por qué deciden participar? «La principal industria perjudicada por los efectos del cambio climático es la aseguradora», informa la AFoA, y agrega que al reducir los gases que provocan el cambio climático se reducen los riesgos.