Además, se destacó el trabajo realizado en el programa «El Seguro va a la Escuela» que ya parecía ser una propuesta de Belgrano hace casi 220 años.
El miércoles 4 de noviembre, en el hall de entrada del edificio de la Superintendencia de Seguros de la Nación (SSN), ubicado en Julio A. Roca 721, se colocó una imagen del Dr. Manuel Belgrano como «Precursor del Seguro Argentino».
Además, se realizó una reunión en el salón de actos del organismo que contó con la participación del Superintendente, el Lic. Juan A. Bontempo; el Vicesuperintendente, Lic. Gabriel Wolf; el Dr. Carlos Manuel Trueba, en representación del Instituto Nacional Belgraniano; el periodista e historiador Raúl Jorge Carreira; así como funcionarios de la SSN e invitados especiales.
El homenaje a Belgrano radica, como reseñó Carreira en su disertación, en que se señala al prócer como el auténtico precursor del seguro argentino, y no a Bernardino Rivadavia.
El periodista se encargó de aclarar que la actual celebración del Día del Seguro corresponde a la decisión del titular de la SSN en 1944, «el Coronel de administración don Amaro Ávalos quien, per se y entre gallos y medianoche, en una especie de ucase zarista, logró que el general Farrell -a la sazón presidente de la República- instituyera el 21 de octubre como Día del Seguro, en homenaje a don Bernardino Rivadavia a quie se atribuye la primera iniciativa gubernamental para crear una compañía de seguros, allá por 1811».
Para Carreira, esto fue un error: «en realidad la iniciativa tenía 15 años de existencia, porque el 15 de junio de 1796, como Secretario Perpetuo del Real Consultado, el doctor Belgrano expuso ante el mismo su Memoria ‘Medio generales de fomentar la agricultura, animar la industria y proteger el comercio de un país agricultor’, que cinco meses despúes derivó en la creación de la primera aseguradora con capitales netamente criollos: la ‘Compañía de Seguros Marítimos La Confianza’, el 7 de noviembre de 1796».
Además, Carreira mencionó: «Obsérvese este dato fundamental: en el prospecto de invitación a los futuros accionistas de La Confianza, se incluyó este principio: evitar la expatriación de crecidas sumas que se pagan en concepto de primas a compañías extranjeras».
Finalmente, mencionó: «Cabe recordar que, simultáneamente, propició la creación de una escuela de comercio en la cual, entre otras materias, debía ser incluido el Seguro. Fíjense ustedes que tuvieron que transcurrir casi 220 años para que, con el Programa ‘El Seguro va a la Escuela’, esa cuasi utopía de Belgrano se convirtiera en realidad».
