ESPAÑA | La crisis golpea a las aseguradoras: la facturación cae más de un 6% hasta marzo

Las aseguradoras se preparan para una crisis incierta por la caída de ingresos y el aumento de los gastos. Según fuentes del sector, el descenso de facturación superará el 6% hasta marzo y eso pese a que enero y febrero son meses buenos porque es cuando se firman contratos anuales. Los seguros de vida y los de coches son los más afectados, aunque, como apunta Pilar González de Frutos, presidenta de la patronal Unespa, “lo peor llegará en próximos trimestres”. La Dirección General de Seguros afirma que el sector es solvente, pero vigila su liquidez con la que tendrá que hacer frente a miles de siniestros.

El seguro representa el 5,1% del PIB español, calcula Unespa, y su evolución va ligada a la economía. En enero las aseguradoras esperaban un ejercicio optimista aunque complejo. Los últimos días de febrero sus cotizaciones cayeron en picado y no han levantado cabeza porque los inversores se temen lo peor. Y la agencia de calificación Fitch lo concretó: primero llegará la “tensión sobre los activos de los balances de las aseguradoras a medida que las inversiones sufran pérdidas y/o haya volatilidad del valor de mercado”; luego subirán los costes por los siniestros vinculados a la pandemia, incluyendo el mayor gasto de “los seguros de salud para cubrir hospitalizaciones de personas infectadas, o por muerte en seguros de vida”; y a esto se añadirán “pérdidas por cancelaciones de eventos, crédito comercial y cierre de negocios, entre otros”.

En el lado positivo, Fitch, con cierto tono siniestro, reconoció que la mayor mortalidad de los clientes aliviará las cuentas de las aseguradoras de vida que pagan una cantidad fija anual a sus clientes hasta que mueren.

Fuentes del supervisor, la Dirección General de Seguros, recuerdan que las aseguradoras reforzarán su solvencia porque no repartirán dividendos este ejercicio, aunque admite que sigue de cerca la situación de la liquidez “para evitar posibles contingencias”. En la crisis de 2008-2012 ya hubo alguna firma con este tipo de problemas.

En el sector, todas las fuentes admiten el oscuro panorama. Las previsiones son que el primer trimestre cierre con caídas de la facturación superiores al 6%, con 10.000 millones menos en primas en seguros de no vida (coches, hogar, decesos, garantía de créditos) y unos 7.000 millones en los de vida. Desde la patronal del seguro Unespa, su presidenta, Pilar González de Frutos, advierte de que lo peor está por venir: “Los efectos llegarán en los próximos trimestres”. Unespa destaca el enorme esfuerzo de las aseguradoras con sus proveedores, a los que facilitan liquidez gratis para evitar que desaparezcan tras el estado de alarma, mientras que a los clientes les aplazan recibos.

¿Por qué un golpe tan duro para el sector? Unespa cree que “la paralización de ventas de coches y viviendas se traduce en un parón en la comercialización de seguros de automóvil y de hogar”.

En los próximos meses “emergerá una siniestralidad que está latente porque ahora solo se atienden las reparaciones urgentes”, apunta González de Frutos. Y cita coberturas voluntarias de los automóviles, como las lunas picadas o deficiencias menores en el hogar. “Los asegurados presentarán estos partes cuando la vida vuelva a la normalidad”, añade.

Además, en Unespa prevén grandes atascos de tráfico en el futuro “porque la gente preferirá su coche para evitar las aglomeraciones del transporte público y eso se traducirá en más golpes de chapa”. Los hogares darán más partes porque han hecho un uso más intensivo de electrodomésticos, sanitarios o del sistema eléctrico. Y las empresas también porque, al volver la actividad, “utilizarán con mucha exigencia su maquinaria”. Además, se elevarán los costes por los seguros que cubren operaciones que no se han hecho o créditos impagados.

Seguros de coches. El sector da por perdida la mejor época del año, entre mayo y julio, cuando más coches se venden para estrenarlos en vacaciones. Eso supone una caída de ventas tanto de coches nuevos como de segunda mano. “La baja siniestralidad es coyuntural y tendremos efectos negativos a medio y largo plazo como el incremento de asistencias, reducción de ingresos por menor venta de vehículos e incremento de impagos” admite Jaime Aguirre de Cárcer, subdirector general del negocio asegurador de Mutua Madrileña.

Desde AXA dicen que las asistencias relacionadas con averías se han disparado más del 85% por las baterías y recuerdan que el tráfico ha caído, pero no tanto. Según la DGT, las muertes en carretera esta Semana Santa cayeron un 52% respecto a 2019. En Línea Directa admiten dificultades pero aseguran que han aumentado las ventas de primas un 2,3% hasta marzo: “Nuestro valor diferencial ha sido siempre el precio, que ahora es clave”, argumentan.

¿Cambiarán los usos del coche? Línea Directa apuesta por un incremento de “los vehículos eléctricos, tanto bicicleta, como moto o patinete. El transporte público caerá por miedo a contagios, como el coche eléctrico compartido, pero habrá que ver cómo influye el auge del teletrabajo”. Según el último Observatorio del Conductor de RACE, un 20% de quienes iban a trabajar en transporte público se han pasado ahora al vehículo privado.

Decesos. En contra de lo que se puede pensar, el llamado seguro de fallecimiento o de los muertos, cubre al 47% de la población, 22 millones de personas, según la estadística del seguro ICEA. Joan Castells Trius, presidente de Fiatc, señala que los casos han aumentado un 45% para el sector. El líder es Santalucía, con el 28% de cuota, diez puntos más que la segunda, Ocaso. En Santalucía, desde el 1 de marzo hasta el 22 de abril los fallecimientos se han incrementado en más de 10.500, un 77% más que en las mismas fechas de 2019. La compañía recuerda que no aplica la exclusión por pandemia de sus seguros “por respeto al dolor y sufrimiento de las familias en unas circunstancias tan excepcionales”. En esta época han recibido 40.706 llamadas, un 805% más que en la misma época de 2019. Para gestionar este incremento de consultas, Santalucía “ha contratado 134 personas más para la plataforma de asistencia, asignadas en exclusiva al área de decesos, un 1.218% más que habitualmente”.

Mapfre, la tercera de este sector, afirma que en este periodo ha atendido 8.000 casos por fallecimiento, de los que 3.100 fueron por la covid-19. La pandemia ha impedido que se celebren velatorios o el envío de flores, por lo Mapfre asegura que devolverá el importe no gastado a los clientes.

Seguros de Salud. SegurCaixa Adeslas, del grupo Mutua Madrileña, es líder en estos seguros con un 30% del mercado, por lo que esta crisis afectará “de manera muy importante en los resultados, aunque es pronto para precisarlo”, según fuentes de la compañía. Hasta el 19 de abril, 5.100 asegurados de Adeslas fueron ingresados por el virus “de los que ya han sido dados de alta 3.250. Además, se ha hecho seguimiento domiciliario a 6.250 asegurados, de los que ya se ha dado el alta a 4.300. Los fallecidos son 332”.

Adeslas no tiene hospitales propios, pero Sanitas sí. Para ampliar su capacidad de respuesta, se ha “duplicado el número de plazas de UCI y aumentado un 60% el número de camas con hospitales de campaña, que continuarán desplegados al menos otros seis meses ante la previsión de posibles repuntes de contagios”, dice un portavoz. La compañía ha gastado en material y equipos “más de 15 millones”. “Hemos contratado a más de 900 personas. Nos hemos hecho cargo de todos nuestros pacientes, aunque por ser pandemia, según las pólizas, no nos correspondería”, añade. Sobre la factura a pagar, “es pronto todavía, pero tendrá impacto”, además, por la suspensión de la actividad comercial. Y se acumula el trabajo porque en marzo y abril Sanitas canceló 70.000 citas en sus centros, algo que han tratado de paliar con videoconsultas.

Seguro de Hogar. Todas las compañías destacan que se ha disparado la videoperitación, algo que ha venido para quedarse, con lo que se han evitado visitas a los hogares. Mapfre dice que las reparaciones urgentes de hogar han crecido un 10% respecto a un periodo normal y que tienen más de 300.000 partes pendientes para cuando acabe el confinamiento. Línea Directa ha elevado “un 8,8% la facturación en pólizas de hogar este trimestre” y espera un alto incremento de los partes al acabar el confinamiento.